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Damaris Rosario

Entregados a Él

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Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará  la vida eterna.  Mateo 19:2

Hace unos días me enviaron un Mail que decía que “Un domingo por la mañana en la Iglesia, una cantidad de fieles de alrededor 2,000 personas estaba reunida y se  sorprendieron de ver dos hombres entrar vestidos de la cabeza a los pies de negro y con armas. Uno de los hombres dijo,

– El que se atreva a recibir un tiro por Cristo quédese en el lugar que está.

Inmediatamente el coro se fue, y los diáconos también se fueron, también se fue gran parte de la feligresía.  De las 2,000 personas sólo quedaban 20.  El hombre que había hablado miro al ministro y le dijo:

– ‘OK’, ya me deshice de los hipócritas. Ahora puede empezar su sermón, que tenga un buen día.  Y los dos hombres se fueron.

La verdad es que esta historia impacto mi vida y me ha dejado mucho que pensar como por ejemplo ¿cuanto seriamos capaz se sacrificar por nuestro Señor? Y me doy cuenta que a veces no somos capaces de sacrificar no solo nuestra vida, sino tampoco las cosas que nos gustan.

Hablamos mucho del amor a Dios ¿pero realmente es un amor sacrificial?,  El quiere todo de nosotros, no solo un departamento de nuestra vida, él quiere que le busquemos en espíritu y en verdad. Aunque esto implique perder lo más preciado que tenemos.  La biblia nos enseña que el que no tome su cruz y le sigua no es digno de él.

Y es que el Señor nos muestra su “amor incondicional” que aun siendo pecadores Cristo murió por nosotros para darnos vida juntamente con él, además tenemos una promesa maravillosa y es que cuando dejamos atrás todo lo que nos impide agradarle  y  a hacer su voluntad su palabra dice: que recibiremos “cien veces” más y heredaremos la vida eterna.

Estas promesas nos dan esperanza en un Dios de amor que intercede con gemidos indecibles por su pueblo.  Es gracioso como todo el mundo quiere ir al cielo, creyendo que no tiene que creer, pensar o hacer lo que dice la Biblia. Viviendo a su manera y creyendo en un Dios invisible que solo le promete prosperidad y todo lo que ellos quieren escuchar, cuando eso esta muy lejos de lo que dice El en su palabra.

Aquí le les dejo ese mensaje del que les hablo,  se que después de leerlo traerá un momento de auto-análisis a su vida, porque nos lleva a reflexionar y a darnos  cuenta que aun en el pueblo de Dios hay personas  que asisten a la iglesia pero realmente no le conocen ni han puesto su plena confianza en El.
Que maravilloso seria decir con certeza como dijo el apóstol Pablo, “porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.” Filip.1:21

Mateo 16:25 dice “Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará”