Portada
Antes del anochecer
“Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, vuestro Padre celestial también os perdonará a vosotros.” Mateo 6:14
Dios dice que perdones a todos los que te hacen mal. ¡¿Puede ser?! Sí, Dios te llama a perdonar a cualquiera que te ha hecho enojar, te ha lastimado o te ha ofendido. Conocer el mandato divino de perdonar, por supuesto, no hace que perdonar sea más fácil, especialmente cuando sientes como si te hubieran dado un golpe en la cabeza con un palo. A pesar de que es difícil perdonar, Dios no quiere que lo demoremos.
De hecho, quiere que demos y recibamos perdón inmediatamente. En [tooltip content=”Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo. RV1960″ url=”” ]Efesios 4:26[/tooltip], Pablo escribió: “No se ponga el sol sobre vuestro enojo”.Y Jesús dijo que cuando nos damos cuenta de que alguno tiene algo contra nosotros, tenemos que resolver el problema enseguida, aun si nos damos cuenta cuando estamos en medio del culto (ver [tooltip content=”Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. RV1960″ url=”” ]Mateo 5:23–25[/tooltip]).
Una advertencia: Podemos correr a Dios para pedirle perdón en cuanto nos damos cuenta de que hemos hecho algo malo. Podemos decidir en nuestro corazón perdonar el instante que alguien nos hiere. Pero cuando es necesario tratar con personas físicas y con asuntos realmente sensibles, conviene dejar que la situación se aplaque por unos días antes de ir a perdonar o a pedir perdón. Los involucrados estarán más dispuestos a razonar.
El perdón es un camino de dos vías. Es probable que puedas traer a mente un montón de personas que te han ofendido. Pero tú también has de haber ofendido a algunos. Coloca esta frase en un lugar donde la puedas ver todos los días: “Cuando me niego a perdonar, estoy quemando un puente que algún día tendré que cruzar”. ¡Perdona con buena disposición, porque con más frecuencia de la que te puedes imaginar tú necesitarás el perdón de otra persona!, ¿Hay alguien a quien necesitas perdonar hoy? ¿Necesitas pedirle a alguien que te perdone? Hazlo antes del anochecer.
McDowell, J. J., Kevin. (2005). Devocionales para la familia : McDowell, Josh. El Paso, Texas, EE. UU. de A.: Editorial Mundo Hispano.