Connect with us

Henry Romero

Orando en Todo Tiempo

Published

on

« Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos. Efesios 6:18»

Un día me encontraba sentado frente al computador revisando algunas cosas, cuando de repente me sorprendió un alboroto que provenía desde fuera. Rápidamente me acerque a la ventana para verificar que estaba pasando y me pude dar cuenta que se trataba de una joven de entre 13 y 14 años aproximadamente que peleaba en la calle con su madre. Todos incluyéndome a mí nos encontrábamos sorprendidos y a la vez pendientes de todo lo que pasaba mientras algunos familiares trataban de separarlas.

Dando un vistazo alrededor, me di cuenta que mientras todos disfrutábamos del triste espectáculo, un hermano en Cristo (familiar de las personas que peleaban) se encontraba orando. Eso me llamó mucho la atención, desde mi ventana se escuchaba orando al Señor para que tomara control de la esa situación. Minutos después el se acercó y las separó con autoridad.

Solo pensé, wow, eso es orar en todo tiempo, en verdad él estaba consciente de la difícil situación que estaba presenciando, pero antes tomo la correcta decisión de orar al Señor para que guíe todo. A veces nos encontramos en momentos de desesperación y que parecen que necesitan medidas rápidas y se nos olvida que la medida más inmediata que debemos tomar es poner todo en las manos de Dios.

Orar en todo tiempo debe darnos la idea de que no importa en qué situación nos encontremos, que tan asfixiados nos sintamos, que tan difícil o peligrosa se vea, siempre debemos dar el control a Dios, siempre debemos presentarnos ante Dios. Cristo quiere que nuestra comunión con el padre sea total. No debemos menospreciar la importancia y la eficacia de una oración con fe. “La oración eficaz del justo puede mucho. Santiago 5:16” Eficacia es la capacidad de alcanzar el efecto que espera o se desea tras la realización una acción. Dios hace eficaz la oración del Justo, pero nuestra parte es orar.